Maria Martins, artista brasileña muy destacada, no solo fue escultora, si no también diseñadora, grabadora, pintora, escritora y música. A lo largo de su vida vivió en muchos países lo que le permitió conocer a muchísimos artistas y moverse en un mundo artístico bastante importante, algo impensable para la mujer a principios del siglo XX.

En sus inicios le interesaba mucho la música, cuando viajo a París decidió estudiar pintura, pero con el tiempo descubrió la escultura y se enamoró de ella. Estando en Francia trabajaba mucho con madera, y cuando vivió en Japón aprendió otras materialidades como el mármol, la terracota o la cera perdida. En 1939, estudió escultura con Oscar Jespers, importante escultor (perteneciente al grupo de los Nueve), en Bruselas, y comenzó a utilizar el bronce, material que más destacó dentro de sus obras. ​

Las obras de Martins están bastante influenciadas por el surrealismo, la sensualidad, la imaginería, las formas orgánicas y por las culturas arcaicas de su país (sobre todo, los mitos de la cultura amazónica). En 1940 realizó la escultura titulada “O Ipossivel” o “Lo Imposible”, en ella vemos a dos personajes, un hombre y una mujer, los cuales parecen estar en un eterno enfrentamiento. Ambas figuras están unidas solo en la base de la escultura, pues en su parte superior, lo que asemeja a cabezas, están separados por largas púas.

Expuso en Brasil (en la Bienal de São Paulo, desde su primera versión, 1951) y en 1955 fue premiada como mejor escultor nacional gracias a su trabajo “A soma dos nossos días”. Pero es en el extranjero donde más se destaca la artista, exponiendo en muchos países. Sus obras son parte de importantes colecciones privadas de arte y muchas otras están expuestas en los mejores museos de arte del Mundo, entre ello el MOMA, Museo de Arte de Filadelfia o Museo de Arte Moderno de Sao Paulo, entre varios más.